martes, 4 de mayo de 2010

El ático del barroco español.

Este Altar Mayor se encuentra en el Hospital de la Caridad de Sevilla, construido en el año 1670.


El objeto que más atrae la mirada dentro de la Iglesia es el Altar Mayor. Allí, justo delante de la cruz de Cristo vacís, del pintor Valdés Leal, se encuentra el Entierro de Cristo, de Pedro Roldán.


Esta escultura simboíza la última tarea del amor al prójimo, que es el entierro de los muertos. La obra tiene para mi punto de vista un realismo muy dramatizado y teatral, característico de la expresividad del barroco español.
El retablo mayor, es obra de Bernardo Simón de Pineda, realizado en el año 1674. Su estructura es la típica barroca, banco, cuerpo y ático. En el banco aparecen seis parejas de áticos en acctitud de sostener el pero del retablo. En el centro del cuerpo del retablo se encuentra El Entierro de Cristo de Pedro Roldán, a sus lados San Jorge



y San Roque que se encuentran en el centro de las dos calles laterales del retablo enmarcados en dos pares de columnas salomónicas.



El ático esta dividido del cuerpo por un fronton partido muy repujado en talla en el que en el centro se encuentra un medallón. Las esculturas que se encuentran en el ático son las imagenes de la Fe, la Esperanza y la Caridad, las tres Virtudes, además de varios ángeles.

Azucenas de mi Catedral....


Los jarrones de azucenas son comunes en las Catedrales, en concreto en la nuestra de Almería porque la Caterdral está dedicada a la Encarnación, y las azucenas son el símbolo de la encarnación. Este término para denominar a las catedrales viene dado desde la época de los Reyes Católicos, quienes reconquistaron esta zona en 1489 a los musulmanes, y estos no creían en la encarnación de Dios en el Hombre, de ahí el término de la Encarnación para las catedrales y el jarrón de azucenas como símbolo.


sábado, 1 de mayo de 2010

Nuestro Padre Jesús de las Penas de Triana. Escultura del barroco.


Esta imagen a estado durante muchos años atribuida al esultor Gerónomi Hernandez, pero en una restauración en 1996 por el Instituto Andaluz para el Patrimoio Histórico encontró al introducir el endoscopio un papel con la autoría de la imagen. José de Arce la talló en 1655. El Señor representa los momentos antes a su crufifixión, sentado en una peña, en la que le reza a Dios.

La imagen de Jesús de las Penas es de madrea de cedro policromada de 1.48 cm. de altura. Cristo se encuenta sedente y su cuerpo representa una curva,lo que recuerda al manierismo, se encuentra magullado y estigmatizado por la Pasión. Jesús aparece sólo con el paño de pureza, sin mas ropa. Su pierna derecha se encuentra adelantada a la izquierda, mientras que sus manos se encuentran entrelazadas en acctitud orante, al igual que las Inmaculadas de Cano o Murillo, pero a diferencia de que el Señor tiene los brazos separados del tronco.


La cabeza esta alzada y ladeada levemente a la derecha. El pelo esta tallado con una raya en medio y con rizos, dejando ver partes de las orejas, incluso las gotas de sangre por la frente.Su barba es bífida, algo característico en las imágenes de la época.



Otro detalle de Cristo es la magulladura en las mejilla y el hilo de sangre que le cuelga del lado izquierdo. Es de mencionar que en este año el Señor de las Penas de Triana hace su 355 aniversario.

Murillo, la sensibilidad de la Fe.



Murillo nace en Sevilla y fue uno, sino el mejor pintor del barroco en el S. XVII. Representa con gran sensibilidad las nuevas tendencias del siglo y de ahí su gran éxito. Renueva la pintura gracias a su delicadeza y finura. Murillo crea una pintura con mucha personalidad, una pintura que apacigua los sentimientos mediante la dulzura.



Además tiene gran virtud a la hora de crear composiciones, tanto comunicativas como expresivas, sin llegar a tener como modelo en el lienzo el culmen de sentimientos extremos, desarraigados, o desgarrantes como los martirios de Ribera y de Zurbarán ; es una pintura que expresa dulzura.



Murillo ya en sus orígenes destacó por buen dibujante.




Comenzó a pintar en el taller de Juan del Castillo, en su ciudad natal, donde además tuvo como compañero en el taller al granadino Alonso Cano.



Bartolomé destaca por su buen gusto en el color de sus pinturas, y por sus temas de valores sociales, por ejemplo los niños mendigos o la insalubridad de la época.



En resumen Murillo siguió el esquema de las caracteristicas de la pintura barroca española con el tenebrismo, la luminosidad desde puntos externos, colores ocres sobre fondos lisos y neutros. Aunque su éxtito surgió por la constante renovación y por la fortuna al pintar



las Purísimas y las Inmaculadas para defender lo que sería el Dogma de la Inmaculada Concepción.

Zurbarán, el pintor de los hábitos.



Francisco de Zurbarán hace como aportación a la pintura barroca española la religiosidad católica y el reflejo de la vida.


También desarrolla el naturalismo tenebrista, característico de la pintura barroca, al igual que también adoptaron el tenebrismo Velázquez y Ribera.Zurbarán trabaja representando de la manera más realista posible. ÉL era principalmente pintor de monjes y frailes,




y con sus pinturas en monasterios y conventos consigió gran éxito, pero a midad del siglo XVII cambian las tendencias y la pintura de Murillo lo hace fracasar arruinandole el taller por la falta de encargos.




Francisco Zurbarán tiene un tratamiento minucioso de los detalles,



de ahi que sus mejores logros sean




naturalezas muertas o lienzos llenos de expresividad.

Ribera, el españoleto.



Ribera era un pintor del S. XVII, muy atraido por las estampas de la vida cotidiana, por el naturalismo.





Con este estilo alcanza la cúspide de su obra. Viaja a Roma y Nápoles , donde conoce al igual que Velazquez la obra de Caravaggio. Gracias a esto recibe gran cantidad de encargos gracias a el dramatismo de los martirios que plasma sobre los lienzos.








Con el paso de los años atenua el tenebrismo de su paleta y se centra en la pintura clasicista de los Carrasi.








Las obras que realiza en estos años tienen un gran colorido y una luminosidad que recuerdan a las propias de la Escuela Veneciana.







Finalmente recupera su antiguo estilo tenebrista pero con gran cantidad de luminosidad, las que recuerdan el estilo de Tintoretto



Velázquez, genio de la pintura barroca española.


Velázquez, nace en Sevilla en 1599. Pertenece a la escuela de pintura barroca de España, junto con otros maestros como Murillo, Zurbarán o Ribera. Tiene una primera etapa en su obra inspirada en el italiano Caravaggio.La Etapa Sevillana.
Esta etapa trata temas constumbristas, en la que intervienen personajes de la vida real, naturalista, y en sus lienzos se reflejan incluso los desperfectos, realista. Su paleta es de tonos oscuros. Obras de esta etapa son La Adoración de los Reyes Magos, La Vieja friendo huevos, o el Aguaor de Sevilla.




En el año 1623, gracias a su suegro y su maestro Pacheco viaja a la Corte de Felipe II como retratista.En el 1629 viaja a italia y conoce las obras del renacimiento. Alli se consagra como un pintor ejemplar, desde donde recibe a su vuelta los encargos más importantes como la decoración del Palacio de Buen Retiro.

En 1649 regresa a Italia y a su vuelta realiza sus mejores obras al interesarse por la luz y el color. Su paleta se aclara, y realiza lienzos como la Fragua de Vulcano. Esta es su Etapa Italiana.


Finalmente culmina con su Etapa Madrileña muy interesado por la luz, dando similitudes con la pintura Impresionista.


Ejemplos de esta fantastica etapa son dos de sus obras cumbre como la Venus del espejo o La Familia de Felipe II, conocido por Las Meninas.


viernes, 30 de abril de 2010

La Purísima Concepción, lienzo de Murillo en Almería






La Purísima Concepción de Almería es un óleo sobre lienzo de grandes dimensiones, perteneciente al S. XVII, concretamente en el año 1640 fechado por murillo en la parte inferior izquierda del cuadro.Se encuentra en la pinacoteca catedralicia. El cuadro se encuentra recientemente restaurado por Francisco Alcaraz, tras haber estado en muy malas condiciones.








En el S. XVII un tema a la orden del dia era el Dogma de la Inmaculada Concepción, que gracias a Murillo se dió a conocer en la pintura, puesto que él fue el primero en representar a la Virgen como se la ve en sus lienzos.





Como anecdotas decir que la imagen de la Virgen es el rostro de su mujer y que las caras de los ángeles son las de sus hijos. La Purísima se encuentra en una posicion central, suspendida en el aire a modo de divinidad sobre una media luna y siente siete ángeles a sus pies.





La Virgen viste una túnica blanca a modo de pureza y un manto celeste, que simboliza la Concepción por divinidad. Su cabeza se encuentra inclinada hacia el lado derecho y hacia abajo, con los ojos entreabiertos, y una larga cabellera morena suelta símbolo de la pureza.





Sus manos se encuentran semiunidas, lo que representa la sumision a Dios, aunque viendo la composición del cuadro se puede decir que la Virgen esta en un acto de oración envuelta en un mundo divino, cercano al éxtasis espiritual, aunque su cara desborda paz y tranquilidad.









En la parte superior del cuadro se encuentran dos gupos de tres de putis alados respectivamente, que miran desde las alturas a la Virgen. La luz del cuadro viene de un punto de luz del exterior, y realza las caras de los ángeles y la Purísima, además de las ropas de la Virgen creando fuertes contrastes de claros y oscuros para obtener volumen y variedad de color. También sobre la cabeza de la Purísima hay una aureola que destella luz dorada. Los colores del cuadro son colores cálidos, de tonos ócres y dorados.






Por último decir que en la parte inferior del lienzo hay una inscripción que dice así:
-Esta Hermosa Pintura de la Purísima Concepción es Obra Original de DBartolomé E.Murillo, Practicada Segun su Primer Estilo por el Año 1640.- Este lienzo se puede relacionar con otros muchos cuadros de Inmaculadas de Murillo que se encuentran en diversos lugares como la Escuela de Bellas Artes de Sevilla, capillas, o el Museo de El Prado.

jueves, 29 de abril de 2010

La Anunciación de Alonso Cano, Almería




En la Sagrada y Apostólica Iglesia Catedral de la Encarnación de Almería se encuentra, en la Capilla de la Piedad una colección del granadino Alonso Cano. En el retablo que tallara Jesús de Perceval se encuentra una colección compuesta por tres óleos sobre lienzo, La Anunciación, Santa Teresa y La Asunción. La colección fue donada por Don Fernando Charran, racionero de la Catedral de Granada.


El lienzo de La Anunciacion data del año 1687. Su pasaje evangélico es cuando el Arcángel anuncia a Maria la gestación de su Hijo por medio de Espiritu Santo. En el cuadro aparece la Virgen, identica a las talladas en madera por Alonso, con una túnica roja y un manto azul, colores más utilizados para representarla. La virgen tiene un gesto joven en su cara ideal de la escuela andaluza y las manos entrecruzadas sobre su pecho, como dando dulzura y recogimiento a la Noticia. Delante de la Virgen hay un atril con un libro, al pie del atril un ramillete de azucenas, símbolo de la Catedral de Almería. Ante el atril, el Arcangel , en acto de conversación con la Virgen, arrodillado con las manos unidas en señal de sumisión al Señor. El Arcángel viste una túnica blanca con un cíngulo en su cintura. En la parte superior del cuadro, la paloma, que representa al Espiritu Santo, que desde el cielo ve la conversacion e interviene en la Virgen. A la paloma la rodea una nube oscura, que a su vez es rodeada por un aro místico, una aureola dorada. La luz del lienzo es frontal y pretende dar protagonismo a las tres imegenes, adelantadas a un fondo neutro salvo por la luz procedente del Espiritu Santo. El cuadro se encuentra en buen estado y espuesto junto a los otros dos restantes de la colección en la capilla de la Virgen de la Piedad.

Zurbarán, La Inmaculada Concepción.


La imagen de la Inmcaculada Concepción es una de las más repetidas durante el S. XVII porque estaba cuestionada por la Iglesia Protestante, y España se muestra como pais protector de la Fe Católica, por lo que la interpreta mediante la imagen de la Virgen.

La Inmaculada tiene un canon de edad muy joven, común en la zona andaluza, las Virgenes niñas, con caras suaves y delicadas. La Virgen viste una túnica color blanco, simbolo de la pureza ,y manto azul, color caracteristico de la Inmaculada y de la virginidad. Lleva sobre la cabeza una corona de oro, que esta rodeada por una aureola finalizada con estrellas en las puntas.

En los pies tiene una media luna que representa su divinidad además a la Virgen la rodea un aro mistico de tonos ocres y dorados.Se enmarca en un espacio rodeado de nubes en cuyo punto de vista situado muy bajo para dar mayor espacio pictórico se representa un mar con barcos y la costa, probablemente para hacer alusión a que María es intercesora entre el mundo terrenal y Dios. La imagen de la virgen esta muy cera del espectador, para crear conplicidad con el espectador. Tiene dos puntos de luz uno trasero creado por el aro mistico y otro frontal que intenta crear contrastre de luces y sombras en el manto para crear volumen, además de dar importancia al rostro de la Virgen. La imagen se encuentra en el Museo Diocesano de Sigüenza.

miércoles, 28 de abril de 2010

La obra maestra de Juan de Mesa











El Cristo de la Agonía fue ejecutado en 1622 durante el lustro magistral de Juan de Mesa, entre 1618 y 1623. Se trata del sexto de los 11 cruzificados tallados por éste, de los cuales los dos últimos siguen aún sin haber sido identificados. En el contrato de hechura de la escultura, se acordó hacerla en madrea de cedro blanco, sin policromar, pues a principios del S. XVII esta labor era propia de pintores supervisados por los escultores.




La escultura de este impresionante Cruzificado se halla en perfecto equilibrio entre la divinidad de un Dios asido a su trono de martirio y el realismo del drama de la agonía de un hombre. Además, cumple todos los requisitos para definirlo como un gran imán de fervor y devoción debido a su grandeza y decoro, por su fuerte garra expresiva y por su sencillo lenguaje evangelizador.




Tanto en calidad como en tamaño, 2.18m, el Crucificado de la Agonía destaca sobre el resto de los realizados por Mesa, erigiéndose como la obra cumbre del "imaginero del dolor". Dicho esto, entenderíamos por tanto que se trataría de una de las esculturas más sobresalientes del arte español. Si bien Mesa es reconocido como el más dramatico de los escultores barrocos andaluces, no cabe duda que de las imágenespor él realizadas, pues con ella rompió decididamente con los cánones montañesinos, conjugando su propio lenguaje plástico de herencia helenística.




El estudio anatómico de laimagen es de un asombroso verismo idealizado. La complexión del cuerpo es atlética, con amplia caja torácica y anchas caderas. E´ste apolíneo cuerpo, exento de descomposiciones patéticas, posee un acertado modelado que subraya la tensión de aquellos musculos que, por lógica, contribuyen a fingir la sensación de incorporación de la figura sobre los clavos de los pies, bien para tomar aire, bien para dirigirse al Padre. La efigie se yergue sólidamente sobre la pierna izquierda, escorzándose hacia su derecha. Los brazos se disponen de forma horizontal, lo cual invierte en otorgarle al cuerpo una gran sensación de ascensión. La imponente cabeza, con corona de espinas tallada en el mismo bloque, dirige la mirada hacia el cielo con un movimiento violento hacia su derecha y arriba. La boca abierta, la mirada suplicante y las cejas elevadas por el músculo superciliar o músculo del dolor, nos recuerda a la del Laoconte, aunque su ademán transmite más dulzura que brusquedad y patetismo.




El tipo de sudario cordífero, que por vez primera pusiera en práctica el Cristo de la Conversión de Sevilla, deja entrever la cadera izquierda. Se trata del más agitado y turbulento de entre todos lo por él esculpidos, y está dibujado basándose en finos y profundos pliegues.